Appeltaart o Dutch Apple Pie: un pastel de manzana típico de Países Bajos, entre convivencia y rica tradición familiar

Origen
La Dutch Apple Pie, conocida en Países Bajos como Appeltaart, es un pastel de manzana tradicional originario de los Países Bajos. Su historia se remonta a varios siglos, con raíces profundamente arraigadas en la cocina neerlandesa.

El término Appeltaart significa literalmente “pastel de manzana” en neerlandés. Esta repostería se distingue por su masa a menudo gruesa y mantequillosa, así como por su generoso relleno de manzanas ácidas y dulces, a veces enriquecido con canela, limón, pasas o incluso manzanas secas.

Historia y evolución
El pastel de manzana es un postre popular en muchas culturas europeas, pero la versión neerlandesa se caracteriza por una masa más densa y un estilo de preparación propio de las tradiciones de los Países Bajos.

Históricamente, las manzanas siempre han sido una fruta abundante en los Países Bajos, y los pasteles de manzana formaban parte de los postres caseros tradicionales. La receta tal como la conocemos hoy se desarrolló a partir de los pasteles campesinos, destinados a aprovechar la fruta disponible en abundancia y a durar varios días gracias a la cocción y al azúcar.

La Appeltaart neerlandesa también se distingue por una masa que a menudo se teje en forma de rejilla en la parte superior, recordando a los pasteles rústicos del norte de Europa.

Tradición
La Dutch Apple Pie es un elemento imprescindible en las celebraciones familiares, meriendas y cafés de los Países Bajos. Suele servirse tibia, acompañada de crema fresca (slagroom) o helado de vainilla.

Su popularidad trasciende las fronteras neerlandesas, especialmente en Estados Unidos, donde la Dutch Apple Pie se ha convertido en una variante conocida del pastel de manzana tradicional estadounidense, con una textura más densa y un sabor más rico.

Receta tradicional de Dutch Apple Pie (Appeltaart)

Ingredientes
Para la masa:

• 300 g de harina

• 200 g de mantequilla fría en cubos

• 100 g de azúcar

• 1 huevo

• 1 pizca de sal

• 1 cucharadita de levadura química

• 2 cucharadas de leche (opcional)

Para el relleno:

• 6 manzanas ácidas (tipo Granny Smith o Boskoop)

• 100 g de azúcar

• 1 cucharada de canela en polvo

• 50 g de pasas (opcional)

• Zumo de medio limón

• 50 g de almendras laminadas (opcional)

• 30 g de pan rallado (para absorber el jugo)

Preparación

Preparar la masa:

1. Mezclar la harina, el azúcar, la levadura química y la sal en un bol. Añadir la mantequilla fría y trabajar con la punta de los dedos hasta obtener una textura arenosa.

2. Incorporar el huevo y mezclar rápidamente para formar una bola homogénea. Si la masa está demasiado seca, añadir un poco de leche.

3. Envolver la masa en film transparente y dejar reposar en frío al menos 30 minutos.

Preparar el relleno:

1. Pelar, descorazonar y cortar las manzanas en láminas finas.

2. Colocarlas en un bol grande con el azúcar, la canela, el zumo de limón y las pasas. Mezclar bien.

Montar la tarta:

1. Precalentar el horno a 180°C (th.6).

2. Extender dos tercios de la masa en un molde engrasado, subiendo bien por los bordes.

3. Espolvorear pan rallado en la base (esto evitará que la masa se humedezca).

4. Distribuir el relleno de manzanas sobre el pan rallado.

5. Extender el resto de la masa y colocarla como tapa, o formar una rejilla con tiras de masa sobre el relleno. Espolvorear almendras laminadas si se desea.

6. Pintar la masa superior con un poco de leche o yema de huevo para dorar.

Hornear:
Hornear aproximadamente 50 minutos, hasta que la masa esté dorada y crujiente.

Servir:
Dejar templar antes de servir. Tradicionalmente, la Dutch Apple Pie se sirve con crema fresca (slagroom) o una bola de helado de vainilla.