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Quiche Lorraine Tradicional: Receta Histórica de la Edad Media para una Cocina Auténtica
Quiche Lorraine Tradicional: Receta Histórica de la Edad Media para una Cocina Auténtica
Origen y primeras referencias escritas
El término «quiche» proviene probablemente del alto alemán antiguo Kuchen o del franco küche, que designan una forma de tarta salada, lo que otorga a la quiche una etimología de raíz germánica.
La quiche está documentada en Lorena desde la Edad Media, en forma de una torta elaborada con masa de pan, rellena y cocida en los hornos comunales.
La primera mención escrita de la quiche data del 1 de marzo de 1586, en los archivos del duque Carlos III de Lorena, donde se menciona una quiche servida en la corte.
Otras referencias aparecen en el siglo XIX, describiendo «quiches» o «galettes lorraines», ya conocidas entonces como quiche o galette con tocino.
Evolución y estatus de la receta
Inicialmente, la quiche se preparaba con una masa fina de pan, rellena con una mezcla simple (huevos, nata o mantequilla en virutas). La introducción de la masa quebrada, más refinada, es una innovación del siglo XIX.
El siglo XIX marca la transición de la quiche de ser un plato rural modesto a convertirse en una entrada sustanciosa apreciada por la burguesía urbana.
Receta tradicional oficial (sin queso)
La receta «auténtica» de la quiche lorraine sigue una estricta sobriedad:
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Masa: masa quebrada (no hojaldrada), preparada con harina, mantequilla, agua y sal.
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Relleno (la "migaine"): mezcla de huevos batidos y nata espesa.
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Condimentos: sal, pimienta y, según ciertas variantes clásicas, una pizca de nuez moscada.
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Carne: tocino ahumado cortado en dados. El uso de queso se considera una desviación de la tradición, especialmente en la producción industrial.
Defensa del sabor original
Diversos autores y chefs históricos, como Elizabeth David o Julia Child, han insistido en la ausencia de queso en la quiche tradicional, considerando que su inclusión altera el delicado equilibrio del sabor original.
Receta de la Quiche Lorraine Tradicional (versión histórica)
Tiempos indicativos:
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Preparación: 20 minutos
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Cocción: 35 a 40 minutos
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Reposo de la masa (opcional): 30 minutos
Ingredientes (para un molde de 26 cm):
Para la masa quebrada:
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250 g de harina de trigo
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125 g de mantequilla sin sal (fría, cortada en cubos)
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1 yema de huevo (opcional, como aglutinante)
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1 pizca de sal
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Aproximadamente 3 a 4 cucharadas de agua fría
Para el relleno (la migaine):
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3 huevos enteros
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200 a 250 ml de nata espesa (mínimo 30 % de materia grasa)
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150 g de tocino ahumado en dados (o panceta salada)
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Sal, pimienta negra recién molida
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Nuez moscada (opcional, según algunas versiones del siglo XIX)
Importante: No se debe añadir queso rallado; históricamente, la receta no lo incluía.
Preparación
1. Masa quebrada
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Mezclar la harina con la mantequilla con la punta de los dedos hasta obtener una textura arenosa.
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Incorporar la yema de huevo (opcional), la sal, y añadir el agua poco a poco hasta formar una masa homogénea.
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Amasar brevemente. Cubrir con film y dejar reposar 30 minutos en frío (opcional).
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Extender la masa hasta un grosor de 2 a 3 mm. Forrar un molde previamente engrasado. Pinchar el fondo con un tenedor.
2. Relleno
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Dorar el tocino en una sartén sin añadir grasa. Escurrir para eliminar el exceso de grasa.
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Batir los huevos con la nata. Salpimentar con moderación y añadir nuez moscada si se desea.
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Distribuir el tocino sobre la masa. Verter encima la mezcla de huevos y nata.
3. Cocción
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Precalentar el horno a 180 °C (calor convencional o ventilado).
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Hornear la quiche durante 35 a 40 minutos, hasta que la superficie esté bien dorada.
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Dejar templar antes de servir. Puede disfrutarse caliente, templada o fría.
Notas históricas
La quiche en la Edad Media se elaboraba con una masa de pan cocida en hornos comunales, y no siempre incluía tocino.
La transición a la masa quebrada data del siglo XIX y corresponde a la versión considerada hoy como «tradicional».
La adición de queso rallado, aunque común en recetas modernas o industriales, es considerada una herejía por los puristas loreneses.